MIÉRCOLES DE CENIZA 2019
El próximo 6 de marzo, Miércoles de Ceniza, comienza la Cuaresma, tiempo de preparación para la celebración de la Pascua. Es un periodo para arrepentirnos de nuestros pecados y de cambiar algo de nosotros para ser mejores y poder vivir más cerca de Cristo.
Es un día importante para los cristianos, y todos juntos, niños, padres y catequistas, con nuestro párroco y diácono, celebraremos la Imposición de Cenizas en dos ceremonias (sin misa): A as 17.00 h., para las familias de Despertar (todos los grupos) y Primer Curso de Catequesis de Primera Comunión (excepto grupos 7 y 10) , y a las 18.00 h. para las familias de Segundo Curso, Grupos 7 y 10 de Primer Curso y Cristo Joven. La ceremonia durará 30 minutos aproximadamente.
Cuando te impongan las cenizas, escucha atentamente lo que te dice el ministro: "Convierte y Cree en el Evangelio". Con estas palabras, se nos recuerda que empezamos ese periodo de cambio interior que nos acerca a Dios.
Al final de este post, podrás consultar el cartel anunciador de esta ceremonia (pulsa para ampliar). A continuación te dejamos un conjunto de preguntas y respuestas didácticas para que comprendas mejor el periodo que comenzamos. Le recordamos que esta celebración sustituye la catequesis para el primer y segundo curso para la semana del 4 al 7 de marzo. El calendario de Despertar no sufre ningún cambio.
¿Qué es el Miércoles de Ceniza?
Es el primer día de la Cuaresma. En este día ponemos de manifiesto nuestro deseo de cambio (conversión) y de acercarnos a Dios. Durante la celebración del Miércoles de Ceniza, se nos impone en la frente las cenizas en forma de cruz, a través de la cual externalizamos nuestro anhelo de estar junto a Dios.
¿De dónde proviene la ceniza?
La ceniza procede tras quemar los ramos de olivos y palmas que fueron bendecidos el Domingo de Ramos del año anterior.
¿Qué pretende la Iglesia con la Cuaresma?
Es un tiempo celebrar y entender porqué murió y resucitó Cristo, por tanto, lo importante de este tiempo no es recordar con tristeza lo que Cristo padeció.
